Tenía pensado retomar el blog
pasado las vacaciones *el mundial* pero se ha presentado una nueva noticia tipo:
‘Estaremos con más noticias en la emisión de la noche o antes si algo
extraordinario ocurre’.
Los servicios públicos de Cartagena
se han vuelto protagonistas por patrocinar revueltas, perturbaciones o talas de
árboles para ponerlos en la mitad de la carretera y usarlos como trincheras para
impedir el paso de los carros por parte de los revoltosos que algo tendran de derecho, no voy a escribir sobre la tala de árboles ni quiénes
son los principales culpables de estos actos de alborotos no deliberados. El problema es mas que personal es una critica individualizada
y dirigida a las imprudencias e impertinencias de los horarios de corte de energía
eléctrica que lo que hacen es mas que restar energía espiritual y anímica a quien(es)
los sufre(n).
La escena/suceso es la siguiente;
todo comenzó como uno de esos días que esperas con ansias que llegue rápido, a propósito
recordar cuando te levantabas a las 7 de la mañana porque esa era la hora a la que
daban uno de tus programas favoritos de niño, todo el mundo está durmiendo y te
levantas con ese pensamiento en la cabeza que te saca de la cama ya sea por
nervio o emoción dependiendo de la edad u otras vicisitudes. Siguiendo con el
itinerario recreativo, cuando de repente se me pasa por mi mente un letrero con
letras en negrita ‘N’ y tal vez uno
que otro ‘#’ parecido al siguiente: ‘Hoy es el gran dia’, acompañado más tarde
con el inherente dolor de barriga que es muy típico por lo menos en mi parte
respecto a estos temas, de paso acabo de recordar que debo tipear en Google ‘remedios
caseros para el dolor de barriga’, esos tips que mas tarde salen en propaganda
tipo Doña Clara (Clorox) y no salen de nuestra mente ni con Clorox, irónico no?
Revisando el itinerario de la ruta recreativa, era un día común y corriente, la
hora punto era a las 3 de la tarde, 28 de junio, ese día jugaba ‘Mi Selección’ después
de haber clasificado a segunda ronda por un partido frente a Japón, tocaba
esperar hasta el sábado mas o menos cuatro días para ver de nuevo a la selección
jugar contra Uruguay, y desde ya empezaba el conteo regresivo. Me acuerdo que
un día antes del partido noto una imagen publicada por un periódico de la
ciudad a través de su Fan Page sobre una oración referente a los cortes de luz
en los barrios a la hora del partido.
La actividad recreacional
consiste en retirar toda corriente eléctrica que pasa por el barrio de tu casa así
como toda vida en dos piernas que deambule por sus alrededores y que toda la gente
del pie de la popa y sitios allegados se arregle; si por arreglar significa
ponerse las chanclas mas pintas tipo: ‘lo que pasa es que voy pa’ cine;
tranquilo viejo yo soy de manga’ y tire pie hasta el centro comercial más
cercano, donde con predicción escrita en un papelito se encuentren con una
plaza llena y una pantalla gigante que a 20 o más metros de distancia dé lo
mismo que un televisor pequeño, de esos de los de ‘los tiempos antiguos’ de ‘los
tiempos donde yo era chico’ de donde los niños le decían ‘pri’ a la abuelita,
bueno todavía le dicen así pero creo que el contexto de lo que significa el año
2014 ya por ser 2014 lo cambia todo en grandes magnitudes. Aquí termino mi
pequeño desahogo a los servicios públicos, una pequeña muestra de lo que hacen
las palabras y hasta donde pueden llegar. Gracias al señor que presiona los
botones o baja las palancas para que se haga la luz yo no sé dónde y quién sabe
dónde…. La luz llegó para el segundo tiempo del partido, donde se pudo ver; como
buen hijo que siempre regresa a casa, el tumulto de personas corriendo de
vuelta a su vieja patria/hogar dejando ver que aquí también tenemos corazón y
patriotismo así sea para dejar que otros disfruten las cosas maravillosas como
las que provee el futbol y la mano amable de aquel que antes pudo haber
provocado algo más que palabras pasmadas en un papel.